El slow life (vida lenta) es una corriente cultural que reivindica un nuevo estilo de vida, caracterizado por una desaceleración de nuestra rutina diaria, totalmente controlada por el frenético ritmo que nos impone el trabajo, los estudios y otras responsabilidades.
Es un movimiento de alcance mundial que se rebela contra esas obligaciones que acaban tomando el control de nuestras vidas, impidiéndonos disfrutar de cosas tan elementales como: disfrutar de una comida relajada con familiares o amigos, pasear por la playa y hacer esas pequeñas cosas que favorecen el bienestar mental como leer, pintar o realizar manualidades.
El origen de esta nueva forma de ver la vida lo encontramos en Italia, en la ya lejana década de los 80, cuando un grupo de ciudadanos, liderados por el periodista italiano Carlo Petrini, consideró una amenaza para la dieta mediterránea la proliferación de establecimientos de comida basura o comida rápida. Entonces decidió potenciar la alimentación tradicional de siempre, a la que bautizó como slow food (comida lenta).
Los objetivos del slow food no pretenden eludir las ataduras ni las responsabilidades, sino revisar aspectos básicos como la comunicación personal, las relaciones de amistad, pareja y familiares, la alimentación y la relajación. Se trata de buscar el equilibrio, el punto intermedio entre estrés y relajación, trabajo y ocio, urgencia y tranquilidad.
Puede que te apetezca empezar a practicar el slow life pero no sepas cómo hacerlo o, sencillamente, te resulte muy difícil desconectar, aunque sea solo por unos días, de la rutina.
En ese caso, tenemos el remedio ideal: pasar unos días diferentes y de relax total en el Predi Son Jaumell Hotel rural, en Capdepera (Mallorca): un hotel de alto nivel que ha reinventado el concepto de alojamiento rural.
Nuestras habitaciones son mucho más que un lugar confortable donde pasar la noche. Hemos cuidado el más mínimo detalle hasta lograr convertirlas en un oasis de tranquilidad, bienestar y exclusividad: bañera de hidromasaje, duchas de lluvia y una decoración original que dota de personalidad propia a cada una de ellas.
La disposición y el diseño de las zonas comunes: jardines, terrazas, piscinas… han sido analizadas y estudiadas con el objeto de que nuestros clientes vivan experiencias únicas y gratificante, en las que prima el relax, la pausa, el vivir el momento en contacto con un entorno natural, lejos de los agobios de las ciudades y los centros turísticos por excelencia.
La gastronomía es uno de nuestros puntos fuertes y en nuestro restaurante, dirigido por el joven y afamado chef mallorquín Andreu Genestra, que cuenta con una estrella Michelín, es posible deleitar el paladar sin ninguna prisa, dedicando el tiempo que haga falta a diferenciar y disfrutar al máximo de una exquisita variedad de sabores y texturas.
Libérate del estrés y la rutina. Es tiempo de activar tu slow life en un entorno perfecto y empezar a conocer todos sus beneficios.
¿Te animas?